La madre como modelo familiar

Es natural que un hijo admire a su madre. Para mí hay más que razones obvias, porque mi madre es el modelo de mujer trabajadora, con elevados principios éticos y muy abnegada con sus hijos, ... y luego con sus nietos y bisnietos. En las líneas que siguen, doy libertad a mi espíritu literario para que exprese mi amor más sincero: el que siento por mi madre.
Mi madre es modelo porque ha tenido un modo de vida ejemplar, que lo ha mantenido en el tiempo, y ni las peores dificultades la hicieron apartar de sus principios. Ana de Escalante Paz, siempre llevó con honor el apellido que recibió de nuestro padre, algo que ya por cierto no se ve, porque se ha perdido el respeto a los conceptos familiares de autoridad y disciplina.
Ella me enseñó el respeto a las personas y muy particularmente a valorar a la mujer, lo cual, en su vida ejemplar, no me resultó dificil.
No tengo palabras para describir en el modo justo, todas las cualidades de mi madre. Son muchas. Pero, sí puedo decir que ella personifica todo lo que representa valor diamantino desde el punto de vista ético.
Siento pasión por escribir, por eso tantos blogs en los que trabajo, por tanto, me es imposible apagar la llama de inspiración y admiración por mi familia, particularmente mi madre, a quien rindo el más merecido tributo en esta publicación, donde queda claro que su legado no son riquezas, sino un inmenso caudal de ética y decencia, dejando claro que la madre como modelo familiar es el fundamento para una sociedad de valores.
Todos algún día tenemos que partir y dejar esta vida. Hay que pensar en el legado que dejamos. Quiero plasmar en mis blogs, apuntes sobre un modo de vida que aprendí de mi madre, de profesores calificados, de amigos cristianos, .. y de la lectura de la Biblia y otras fuentes documentales, todo ello en sumatoria, es mi legado el cual en gran parte es un producto del molde que nuestra madre nos inculcó a todos.